Enemigos de la productividad

Puede que no te des cuenta, pero existen diversos factores dentro de tu rutina laboral que pueden llegar a afectarte en tu trabajo al ser una fuente de distracción, es por ello que te mencionamos algunos de estos para evitarlos a toda costa.

Exceso de documentos

Este es el enemigo más fácil de reconocer debido a que tu escritorio siempre lo encontraras tapizado con documentos para ser revisados.

Planificación escasa

Si en tu vida diaria dentro de la organización donde laboras no cuentas con una lista de chequeo para actividades diarias, semanales y mensuales, estás trabajando sin dirección y enfrentas a un enemigo poderoso que desbarata el fluir de tus tareas.

Actividades triviales

Si construyes una lista de actividades que consideres triviales y al terminar el día haz realizado solo tareas de esa índole, eres prisionero de un enemigo pequeño pero que trabaja en grupo. Esas trabas mínimas, aunque parezcan obligatorias, pueden frustrar cualquier proyecto importante.

Delegar poco

Dicen que el secreto para hacer más es hacer menos pero mejor. Ese “hacer menos” significa delegar, empoderar a nuestros pares y colaboradores para que sumen en las actividades de tu día a día.

Sueño después del lunch

Para muchos las horas postcomida generan un sopor interminable.  Nuestro cerebro se atonta, aletarga y habitúa para no generar valor. Esto se debe a que el flujo sanguíneo favorece el estómago para facilitar la digestión. Para evitarlo, es mejor tener varias comidas ligeras durante el día para evitar los atracones que provocan el sueño vespertino.

Celular y redes sociales

Hace años este enemigo no existía, lo creo la modernidad.  ¿Cuantas veces miras el celular o revisas Facebook? Tu respuesta te dirá si a veces tu dispositivo de comunicación más personal se transforma en un obstáculo.

Interrupciones constantes desde afuera

En todas las organizaciones existen personas que sin querer andan como un virus tratando, con éxito o sin él, de desconectar a otros de su concentración en el trabajo. Este oponente (en sentido figurado) es el único que puede atribuirse a personas de carne y hueso.

Fuente: Soy Entrepreneur